LA INFRAESTRUCTURA VIAL DE AREQUIPA Y SU
FUTURO
Enviado por: Arq. Manuel Jesús Javier Chacón
Villalba
Arequipa
es una metrópoli con un millón de habitantes que crece con una tasa anual del
2.4%. Sin embargo, vivimos con la infraestructura para 750 mil habitantes.
Crece el parque automotor, hoy estimado en 200 mil vehículos, crecen las áreas
residenciales, comerciales, industriales, crecen las invasiones en los
distritos. Por falta de planificación, la Ciudad Blanca está enferma. En estas
condiciones no garantiza condiciones de habitabilidad.
La
infraestructura vial es deficiente y sin articulación espacial. Eso genera un
crecimiento desordenado de lo urbano en detrimento de lo rural. Cada día
tenemos más vehículos, poca infraestructura vial, mala gestión de movilidad
urbana y un deprimente servicio de transporte público.
Las
obras viales de mayor envergadura fueron los tres intercambios viales de
Francisco Mostajo, El Palomar y Los Incas. Sin embargo, se ejecutaron sin
planificación ni organización lo que provocó problemas sociales, económicos y
ambientales. Para coronar su ineficiencia, los inauguraron sin semáforos, sin
puentes peatonales ni la liquidación técnica y financiera. También se
pavimentaron calles del centro histórico con adoquines, pero con varias
observaciones de la Dirección Regional de Cultura.
Tenemos
cuatro obras importantes en marcha: La autopista Arequipa – La Joya a cargo del
Gobierno Regional de Arequipa (GRA) con indicios de sobrevaloración y que ha
generado conflictos sociales con invasiones, invasores y funcionarios con
indicios de corrupción. El Puente Chilina, a cargo del GRA y el sector privado.
Con esta obra la región endeudó su canon por 6 años. La Variante de Uchumayo a
cargo del GRA y el Gobierno Nacional, ahora con problemas de liquidez por
recortes del canon. El Sistema Integral de Transporte (SIT) ahora a cargo del
Ministerio de Transportes con problemas en los estudios que deben corregirse.
Se anuncia tenerlo operativo para fines del 2016.
Es
lamentable que el presidente Humala no tenga voluntad política para incrementar
la inversión en proyectos viales. Lima cuenta con 7 mil millones de soles en
infraestructura vial que la convertirá en una ciudad del siglo XXI y preparada
para los Juegos Panamericanos del 2019. En cambio Arequipa sigue olvidada.
La
Ciudad Blanca es un organismo enfermo, con un grave problema en su sistema
circulatorio. Mi diagnóstico es que sufre de “cardiopatía isquémica crónica
urbana” por la mala función de sus arterias, necesita de varias intervenciones
quirúrgicas urbanas pero con los criterios del urbanismo sustentable. Solo así
se convertirá en vivible y sustentable.
Colombia
aplicó exitosamente los criterios del urbanismo sustentable con su programa
“Estrategia Ambiental Integrada para una Movilidad Urbana Sustentable en
Bogotá”. La movilidad urbana sustentable plantea optimizar el servicio de
transporte público, incentivar sistemas de movilidad amigables con el ambiente,
incluir actores vulnerables, incluir desplazamientos a pie, bicicleta,
patineta, animales, auto, tranvía, micros, autobuses articulados, metros y
monorrieles, con programas de concientización y sensibilización ciudadana.