viernes, 6 de diciembre de 2013

La industrialización peruana: A su servicio

   
Si bien las exportaciones peruanas aún se sostienen principalmente del sector minero, la economía del país ha podido generar encadenamientos productivos que han conducido a la generación de industrias laterales al sector minero. No obstante, tal generación de industrias laterales a sectores extractivos tienen enfrente problemas de competitividad que limitarían su consolidación en el mediano plazo (artículo El supuesto modelo primario exportador).
Ahora bien, el impulso del sector manufacturero peruano –al que se le atribuye cerca del 16% de la producción peruano en mayo del 2013— no debería llevar a que se soslaye el desempeño del sector servicios. En efecto, el sector servicios –en el cual se agrupa el sector “financiero y seguros”, “servicios prestados a empresas”, “restaurantes y hoteles”, “servicios gubernamentales” y “resto de otros servicios”, según definiciones del INEI— constituyeron el poco más del 30% de la producción peruana en mayo. Así, tal proporción se ha mantenido relativamente constante en los últimos meses. De la misma manera, el “resto de otros servicios” aportó 0.75 puntos porcentuales al crecimiento del PBI, en contraste con el 0.13% registrado en el sector manufactura, según cifras del INEI.
Por ello, destacar la relevancia del sector manufacturero requiere también de prestar atención al sector servicios peruano, dado su tamaño y diversificación a través de distintos sectores. En ese contexto, destaca la industria metalmecánica, ya que los principales ejecutivos de las empresas más importantes en dicho sector apostaron por la diversificación en el portafolio de productos hacia uno que ofreciera servicios de mantenimiento y reparación a sus clientes (SE 1364). Por lo tanto, existe una tendencia en determinados sectores productivos de la economía hacia la provisión de servicios como complemento a la fase productiva de bienes. Es decir, el proceso de industrialización peruano se ataría a la tendencia hacia una economía con más preponderancia en servicios.
En ese contexto, cabe destacar que el Perú ha entrado a una fase de industrialización que incorpora a las actividades de sectores como el minero, el agrícola y el pesquero, por lo que aún es complicado emprender un proceso de industrialización que involucre a las mype, ya que tal emprendimiento requiere de medidas para hacer escalables una producción que, dada la naturaleza de las mype, es complejo conseguir.
Por lo tanto, no debería sorprender la inclusión del Perú en aquel club de países emergentes que pueden convertirse en los proveedores globales de bienes. Sin embargo, contamos con un sector servicios creciente que puede constituirse como el principal componente de crecimiento “no tradicional” en el Perú en el mediano plazo.
(Foto: Wikimedia Commons/Alysia)

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